La maniobra podría implicar que Hyundai, la quinta automotriz más grande del mundo, termine retirando más autos que esa cantidad, su récord en Estados Unidos. Además, constituye una cruda advertencia de que la empresa podría haber sacrificado estándares de calidad para lograr una expansión rápida.
El presidente de la firma, Chung Mong-koo, remarcó sistemáticamente que la calidad debería ser lo primero y recientemente redujo la capacidad de expansión a expensas de un control de calidad más estricto, aunque analistas dicen que el cambio de dirección se produjo demasiado tarde.
"Hyundai ha construido fábricas muy rápido en todo el mundo hasta hace pocos años, pero el progreso de su calidad no ha podido equipararse con su rápido volumen de crecimiento", señaló Kim Phill-soo, profesor del Departamento de Ingeniería Automotriz en la Universidad Daelim, en Seúl.
"El último retiro (de autos) destacó las lagunas en el sistema de calidad de Hyundai", agregó.
Un ejecutivo de Hyundai dijo que sonaron campanas de alarma en la empresa luego de haber retrocedido en los rankings de calidad de la industria en los últimos años.
"Hemos resuelto problemas, el ranking de calidad va a mejorar a partir de este año", declaró el ejecutivo a Reuters sin dar más especificaciones y hablando en condición de anonimato porque no tenía autorizado hablar con medios.
El año pasado, Hyundai cayó al puesto 18 en una encuesta de calidad realizada por J.D. Power and Associates, desde el undécimo lugar que ocupaba en el 2011.
"Parte de la razón (por la caída) es que Hyundai se ha expandido rápidamente hacia nuevos segmentos y algunos de los vehículos nuevos no han tenido un desempeño tan bueno como el de vehículos originales como el Sonata", señaló Dave Sargent, vicepresidente de J.D. Power and Associates, en una entrevista con Reuters vía correo electrónico antes del anuncio del retiro.
Hyundai llevará a cabo un retiro, una campaña de servicio y otras medidas correctivas en todos los países donde los vehículos equipados con el interruptor de luces en cuestión hayan sido vendidos, informó la compañía el jueves en un comunicado.
El retiro es otros problema para las empresas, que ya se encuentran bastante preocupadas por una regular debilidad en el yen que permite a sus rivales japonesas vender autos más baratos en los mercados de exportación.
Además, el retiro se produce apenas meses después de que Hyundai Motor admitió en noviembre que había exagerado la capacidad de ahorro de combustible de muchos autos en Norteamérica, una maniobra que dañó su reputación y que podría costarle hasta 440,000 millones de won (394 millones de dólares) en potenciales compensaciones.
Las acciones de Hyundai retrocedieron un 5 por ciento.
APOYA A ESTE BLOG CON UN DONATIVO GRACIAS.
No hay comentarios:
Publicar un comentario