Los fabricantes de carros sacarán su músculo financiero durante la clásica final de fútbol americano, el Super Bowl, este domingo.
El año pasado, un anuncio de 30 segundos emitido durante el partido costó una media de 3,5 millones de dólares. Este año la cifra ha aumentado y se estima que se aproxima a los 4 millones de dólares.
De todos los fabricantes, la surcoreana Hyundai, que en los últimos años se ha convertido en el fabricante de más rápido crecimiento en Norteamérica junto con su hermana KIA, es la que hará un mayor despliegue publicitario durante la XLVII Super Bowl.
Hyundai ha contratado cinco espacios publicitarios antes y durante el partido, incluido uno de 60 segundos justo antes del inicio del encuentro, en los que exhibirá sus modelos Santa Fe, Genesis R-Spec y Sonata Turbo.
Mientras, KIA ha elegido a una ex Miss América, Alyssa Campanella, para su anuncio de 30 segundos, titulado "Hotbots" y que será mostrado durante el tercer periodo del partido.
Al menos otros dos fabricantes han elegido estrellas femeninas para protagonizar sus anuncios.
Toyota, que exhibirá la última versión de su todoterreno urbano RAV4, ha elegido a la actriz Kaley Cuoco, protagonista de la comedia de éxito "The Bing Bang Theory", para su anuncio de 60 segundos titulado "Wish Granted".
Por su parte Mercedes-Benz ha contratado a la modelo Kate Upon, una de las favoritas de la revista "Sport Illustrated", para presentar el nuevo CLA, cuyo debut oficial será en el Salón del Automóvil de Ginebra en marzo.
El fabricante alemán tiene un papel doble en esta final de fútbol americano, ya que este año la Super Bowl se celebra en el famoso Superdome de Nueva Orleans, el refugio de miles de personas durante el huracán Katrina y cuyo nombre oficial es "Mercedes-Benz Superdome".
Otro fabricante alemán, Volkswagen, y que en el pasado ha creado anuncios memorables como el de 2011 para el modelo Passat con un mini Darth Vader, estará presente con un anuncio de 60 segundos que aparecerá durante el segundo periodo para su nuevo Beetle 2013.
El anuncio, que el fabricante ha colocado en YouTube, ha causado polémica al representar a una persona caucásica con un acento marcadamente jamaicano.
Por su parte, Audi, la marca de lujo de Volkswagen, ha permitido que el público elija el final de su anuncio, por primera vez en la historia de la publicidad de la Super Bowl, por votación a través de YouTube.
Lincoln, la marca de lujo de Ford, también ha utilizado por primera vez un medio social, esta vez Twitter, para crear uno de los dos anuncios que transmitirá durante el partido.
Y mientras la mayoría de los fabricantes eligen mostrar con antelación sus anuncios para aumentar su impacto, el Grupo Chrysler y General Motors han optado por la ruta opuesta.
El Grupo Chrysler no ha revelado ningún detalle de su campaña publicitaria para la Super Bowl, como en los dos últimos años en los que utilizó a grandes estrellas (el rapero Eminem en 2011 y el actor-director Clint Eastwood en 2012) para promocionar sus productos.
General Motors no ha contratado ningún espacio publicitario para la Super Bowl. Pero regalará un vehículo de su marca Chevrolet al jugador más valioso de la final y ha indicado que "sorprenderá" a la audiencia.
El fabricante ha negado que durante el espectáculo del descanso vaya a regalar un nuevo Chevrolet Corvette Stingray, que fue presentado en enero, a la cantante Beyoncé. Pero también ha rechazado comentar si el clásico deportivo será parte del espectáculo.
El año pasado, un anuncio de 30 segundos emitido durante el partido costó una media de 3,5 millones de dólares. Este año la cifra ha aumentado y se estima que se aproxima a los 4 millones de dólares.
De todos los fabricantes, la surcoreana Hyundai, que en los últimos años se ha convertido en el fabricante de más rápido crecimiento en Norteamérica junto con su hermana KIA, es la que hará un mayor despliegue publicitario durante la XLVII Super Bowl.
Hyundai ha contratado cinco espacios publicitarios antes y durante el partido, incluido uno de 60 segundos justo antes del inicio del encuentro, en los que exhibirá sus modelos Santa Fe, Genesis R-Spec y Sonata Turbo.
Mientras, KIA ha elegido a una ex Miss América, Alyssa Campanella, para su anuncio de 30 segundos, titulado "Hotbots" y que será mostrado durante el tercer periodo del partido.
Al menos otros dos fabricantes han elegido estrellas femeninas para protagonizar sus anuncios.
Toyota, que exhibirá la última versión de su todoterreno urbano RAV4, ha elegido a la actriz Kaley Cuoco, protagonista de la comedia de éxito "The Bing Bang Theory", para su anuncio de 60 segundos titulado "Wish Granted".
Por su parte Mercedes-Benz ha contratado a la modelo Kate Upon, una de las favoritas de la revista "Sport Illustrated", para presentar el nuevo CLA, cuyo debut oficial será en el Salón del Automóvil de Ginebra en marzo.
El fabricante alemán tiene un papel doble en esta final de fútbol americano, ya que este año la Super Bowl se celebra en el famoso Superdome de Nueva Orleans, el refugio de miles de personas durante el huracán Katrina y cuyo nombre oficial es "Mercedes-Benz Superdome".
Otro fabricante alemán, Volkswagen, y que en el pasado ha creado anuncios memorables como el de 2011 para el modelo Passat con un mini Darth Vader, estará presente con un anuncio de 60 segundos que aparecerá durante el segundo periodo para su nuevo Beetle 2013.
El anuncio, que el fabricante ha colocado en YouTube, ha causado polémica al representar a una persona caucásica con un acento marcadamente jamaicano.
Por su parte, Audi, la marca de lujo de Volkswagen, ha permitido que el público elija el final de su anuncio, por primera vez en la historia de la publicidad de la Super Bowl, por votación a través de YouTube.
Lincoln, la marca de lujo de Ford, también ha utilizado por primera vez un medio social, esta vez Twitter, para crear uno de los dos anuncios que transmitirá durante el partido.
Y mientras la mayoría de los fabricantes eligen mostrar con antelación sus anuncios para aumentar su impacto, el Grupo Chrysler y General Motors han optado por la ruta opuesta.
El Grupo Chrysler no ha revelado ningún detalle de su campaña publicitaria para la Super Bowl, como en los dos últimos años en los que utilizó a grandes estrellas (el rapero Eminem en 2011 y el actor-director Clint Eastwood en 2012) para promocionar sus productos.
General Motors no ha contratado ningún espacio publicitario para la Super Bowl. Pero regalará un vehículo de su marca Chevrolet al jugador más valioso de la final y ha indicado que "sorprenderá" a la audiencia.
El fabricante ha negado que durante el espectáculo del descanso vaya a regalar un nuevo Chevrolet Corvette Stingray, que fue presentado en enero, a la cantante Beyoncé. Pero también ha rechazado comentar si el clásico deportivo será parte del espectáculo.
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